mm

domingo, 25 de agosto de 2013

¡AY, LOS AFECTOS!

Una de mis preferidas de Mapplethorpe
Esos sin los cuales la vida no merece la pena vivir. ¿Por qué a ciertas personas les cuesta tanto llegar a esta conclusión? me sigue sorprendiendo...

No siempre un gran amor es la respuesta, están los cariños, la ternura, la pasión y hasta a veces la devoción. Diferentes todos e igual de confortantes, vivificantes porque al final del camino, sea éste cual fuere, lo único que nos vamos a llevar es todo lo que hayamos querido sin importar siquiera que nos hayan correspondido o no. Allá ellos, los que no son capaces de dar y a veces ni tan siquiera recibir.

Liam Neelson en su faceta más tierna. FilmmakerIQ.com

Echo en falta ese amor desmedido que no espera recompensa, ese que únicamente profesan las madres, pero tengo tanto amor dentro de mí que  me sale a borbotones y a veces me emociono de la manera más tonta. Amo a la gente generosa por naturaleza, a la que me dedica una sonrisa sin conocerme, a quien me trata bien y con respeto. Y sí, a veces cuesta encontrar una mirada que nos alegre el día, estos días  oscuros y complicados que  nos está tocando vivir de una manera u otra. La gente sufre y el único refugio posible y viable está en la emoción de volver a ver un amigo querido, en el abrazo reconfortante.

Omar Ortiz_Open Art_ Group_______
Pero de repente y sin previo aviso aparece la pasión de nuevo o por primera vez quizá, esa que nos hace temblar el pulso pero que a la vez nos llena los pulmones de un aire que nunca habíamos sentido tan límpido, inmaculado y hasta cristalino. Y todo se llena de color refulgente, resplandeciente, radiante, vibrante... y me faltan adjetivos porque de la pasión se debería hablar siempre con vehemencia, sin rubor , con los sentidos exacerbados. ¿Hay algo acaso que nos haga sentirnos más vivos y mejor?





domingo, 11 de agosto de 2013

¿DÓNDE ESTÁ LA EDUCACIÓN?

geniomaligno.wordpress.com
La buena digo... porque de la otra ya empiezo a estar más que cansada la verdad.

No se si serán  cosas mías, o que me estoy haciendo mayor, pero veo que las buenas costumbres y la buena educación de toda la vida o "good manners" que dirían los ingleses, se está perdiendo o sencillamente ha dejado de existir. 

Hablando de los británicos, recuerdo que cuando llegué por primera vez a Londres me llamó mucho la atención tanto "excuse me", "sorry"... a cada momento. Quizás un tanto excesivo sobre todo cuando no se está acostumbrado, pero sin lugar a dudas me quedo con ese tipo de "cultura" que tanto practican, superflua o no, me da igual. Lo que es seguro es que resulta mucho más agradable. Todavía me estoy acordando de una "señora" por decir algo, que me pegó tal pisotón que me dejó una uña violácea. A pesar de que los colores que le siguieron y su transformación fue muy interesante, hubiera agradecido un "perdona", "disculpa", e incluso un ¡Ay! y una miradita... pero no hubo nada de eso.
Esta es la mejor edad para empezar a aprender

Los niños de hoy son el resultado de unos padres excesivamente permisivos, que casi nunca llevan a cabo sus "amenazas" de castigo. Habrá quien no esté de acuerdo conmigo, por supuesto, y es de lo que se trata al fin y al cabo, pero yo recuerdo que hace "unos añitos" había más respeto por los mayores y yo creo que podíamos jugar más y mejor con menos cosas. Lo que desde luego no se nos olvidaba era que si hacíamos algo mal, aquello no iba a quedar como si no hubiera pasado nada...



miércoles, 7 de agosto de 2013

VIVIR SIN TI

loneliness by Vladimir Dedal Larionov.jpg
Es raro, aburrido, triste, gris. Los días se amontonan, se confunden, la noche y el día, el principio, el fin.

Irrumpes, invades sin llamar. Te vas sin palabras, vaciándome sin forma, cóncava, convexa, qué más da.

Tus besos, los nuestros, infinitos, besos eternos, de improviso, como tú efímeros, ¿A dónde fueron?


No te busco en otros cuerpos ¿No lo crees? no importa, no interesa no existe urgencia. Mi ardor y entusiasmo, mi ímpetu y pasión están dormidos, como antes de ti.

-¡Eres tan divertida!-, risas, miradas profundas, cómplices carcajadas. La gente nos mira  con envidia. Despreocupación  contagiosa. ¡Qué felices somos!  El pecho ahuecado de tanta dicha, las manos juntas, leve roce, estrujón  -¿A dónde crees que vas?-  no tardes, no te entretengas, dime qué estás haciendo ahora. ¿Qué lees? , mira mis libros, aquí tengo las fotos.  Háblame, te echo  de menos, te amo tanto que voy a explotar.

¡Nunca  dejes de soñar! Tu tristeza es historia.
¿Sonríes? Incrédula, te quiero tanto... ya verás. 
Otra vez las campanas. Demasiadas señales dices, -Te adoro créeme, debemos arriesgar- ¡Somos tan parecidos!.
Me pierdo en tus palabras, tus bromas, saltas, ¿resbalas? no, tan sólo juegas ,me abrazas, -deberíamos enfadarnos alguna vez- como esas parejas que ya no hablan ¿Sabes?. No puede ser tanta felicidad.








lunes, 5 de agosto de 2013

DE MADEIRA AL CIELO


Uno de los pocos sitios del centro sin obras
Normalmente dedicamos bastante tiempo a planificar las vacaciones, destinos que imaginamos una y otra vez cuando estamos estresados, tristes o agobiados. Una manera para escapar de la rutina y ponernos de mejor humor sólo pensando lo bien que lo vamos a pasar y las cosas tan bonitas que veremos. Sí, normalmente yo también lo hago, pero en esta ocasión por diferentes causas me vi más o menos "obligada" a coger una oferta de última hora y no tuve tiempo de pensar ni mucho menos planificar.
Rincones escondidos...
No se muy bien lo que esperaba, pero desde luego no una ciudad entera EN OBRAS. Creo que hasta el viajero más indulgente se sentiría más que molesto.
Afortunadamente encontré lugares donde poder disfrutar de su gastronomía, pasear por algunas de las coloridas calles de Funchal, y felizmente, dar rienda suelta a una de mis pasiones; la fotografía. 
Lo más impresionante de la isla son sus paisajes escarpados, con extraordinarios precipicios y hondonadas, no aptos para quienes sufren de vértigo.
Una de las maravillosas vistas que se pueden encontrar en la isla.
No me apetecía alquilar un coche y como tengo por costumbre y es lo que más me gusta hacer cuando viajo, me mezclé entre los Madeirenses en uno de sus autobuses más "populares". ¡Por todos los dioses del firmamento! ¡No sabía dónde me había metido!. No podéis imaginar qué sensación y qué mareo, (superados los 40 grados y por supuesto sin aire acondicionado), aquellas carreteras imposibles en las que los vehículos hacían maniobras aterradoras para darse el paso unos a otros. 
Pasé auténtico miedo, e incluso llegué a pensar que ese sería mi último viaje porque aquello subía, subía y después volvía a subir un poco más, el conductor me miraba de reojo con cara de cachondeo porque yo estaba sentada en primera fila, no vaya a ser que me perdiera mi propia defenestración. Y lo que se suponía que era transporte "urbano" paraba en sitios imposibles en los que las mismísimas cabras no hubieran mantenido el equilibrio. Aquello no terminaba nunca y  el final de aquellos angostos caminos no parecía ser otra cosa, pensé, que el "cielo"...





Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

LECTORES EN EL MUNDO

Únete a mis amigos

http://ads73835.hotwords.com/show.jsp?id=73835&cor=FF0000&tag=div&atr=class&vatr=post-body