 |
| primerasnoticias.com |
No soy una excepción. Tampoco yo me he librado de los estragos de la crisis, pero cuando miro a mi alrededor casi me siento una privilegiada. Ya no hay que irse lejos para encontrar personas que sufren por muchas y cada vez más variadas razones.
Cerca de ti alguien está a punto de perder su único techo, su trabajo, del que muchas veces dependemos incluso psicológicamente. Estar ocupado es altamente terapéutico, y la cola del paro obviamente lo contrario . No entiendo por qué en el INEM no hay un Psicólogo que ayude de verdad a los desempleados y no sólo cubra el expediente.
 | |
| www.teinteresa.es |
Pero cuando es la enfermedad la que acecha, poco se puede hacer salvo luchar con fuerza y confiar en los médicos que "a veces aciertan"...
Si el enfermo es un niño, el corazón se me encoge hasta casi desaparecer. Nada más injusto que el sufrimiento de un inocente.
A los que realmente se encuentran en un punto de no retorno. Quienes están a punto de perder su casa o trabajo, los que ya no pueden pensar en sufrimientos lejanos porque impera la supervivencia.
 |
| saludinternacional.blogspot.com |
Los que hemos perdido estatus y "amigos" en los peores momentos y de manera conjunta, ya no nos engañamos y sabemos que esa gente no pinta nada en nuestras vidas. Por eso, porque hay personas anónimas, seres humanos hermosos, bondadosos, que no merecen la situación que están viviendo, hoy este post va dedicado con toda la fuerza y el amor del que soy capaz y quiero transmitir, A LOS QUE SUFREN.
